Otra pequeña parada de unos minutos en la "Carretera a Hana " te lleva a un bosquecillo de eucaliptos. La corteza de los árboles es increíblemente colorida y realmente se asemeja a un verdadero arco iris, jugando con todos los colores e incluso bastante distinto, por lo que realmente no se puede pasar por alto los árboles.

¿Y cómo se producen realmente estos juegos de colores?

Los eucaliptos renuevan periódicamente su corteza de varias capas. Primero se desprende la parte superior, de color marrón, que oculta la nueva corteza, de color verde brillante, que con el tiempo cambia a verdes más oscuros, azules, rosas, morados, granates y vuelve a ser marrón. Los árboles brillan con todos los colores porque cada parte de la corteza se pela y renueva en un momento distinto.

La mayor arboleda de eucaliptos se encuentra cerca del punto kilométrico 7 de la carretera principal a Hana, o Ruta 360. Se puede aparcar en los aparcamientos improvisados a lo largo de la carretera, pero hay que tener cuidado de no obstruir innecesariamente la concurrida y relativamente estrecha carretera con el coche.